EL FRISO MALER DEL FIN DEL MUNDO MAYA
Cuenta la leyenda de una lejana galaxia que un escritor de ciencia ficcion, sobre la atlantida, obtuvo una imagen proporcionada por un reconocido arqueologo que ya no pudo documentarla porque le gano el viaje al otro mundo...
Expertos ufologos autentican esta informacion como veridica, juran y perjuran, que dicha leyenda occurrio, y como prueba fiel es esta foto (mejor dicho, dibujo)...
Y por supuesto, dicen los antiguos astronautas, tan cierto como lo es el astronauta de palenque y los elefantes rosados del desierto del Sahara....
Los invito a involucrarse en esta historia al mejor estilo de los expedientes X....
La imagen que se presenta como una genuina pieza de arte maya de la ciudad de Tikal. A primera vista, parece representar a un maya que escapa de un volcán. Tenga en cuenta, también, la pirámide colapsada a la izquierda
Otras fuentes rutinariamente describen esto como una "fotografía" y como una representación del hundimiento de la Atlántida. ¡Algunos especuladores en línea incluso intentan identificar el pez en la esquina inferior izquierda con el celacanto! Peor aún, ¡otros dijeron el mes pasado que era trabajo de Freemason o Illuminati!
Puede preguntarse por qué no ha visto esta pieza de arte por todas partes, ya que aparentemente es una representación tan dramática de una erupción volcánica. Bueno, hay una explicación conveniente para eso. Supuestamente, la pieza fue cortada desde lo alto de un templo maya en Tikal y enviada a Berlín, donde fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial. Esa es la historia que David Hatcher Childress cuenta en Lost Cities of Atlantis (1996) y Lost Cities of North and Central America (1992). Naturalmente, la única documentación de esto es esta única "fotografía", que estoy seguro de que reconocerá que es casi seguro un dibujo.
Entonces, ¿de dónde vino la imagen?
Fue publicado en 1939 en Atlantis: Mother of Empires por Robert Stacy-Judd, un arquitecto inglés conocido por -esperarlo- trabajando en el estilo arquitectónico del Renacimiento Maya. Un artista consumado, decoró sus edificios con arte imaginativo al estilo de los antiguos mayas. Su libro era una alegre mezcla de hechos y ficción, y la ilustración de arriba casi con certeza fue creada por él como una representación ficticia de la Atlántida que él creía que estaba detrás de la civilización maya, basándose en las afirmaciones similares de Ignatius Donnelly y Augustus Le Plongeon.
El dibujo aparece como una placa opuesta a la página 91 en el libro (que fue, por supuesto, reimpreso por David Hatcher Childress for Adventures Unlimited en 2007) con un título que lo describe como una fotografía de un bajorrelieve que representa el hundimiento de la Atlántida. La discusión de Stacy-Judd en el cuerpo del texto brinda más detalles. Comienza diciendo que la "fotografía" está en su propia colección privada.
La foto fue tomada por Teobert Maler en un lugar remoto y desconocido en el fondo de las junglas de Yucatán. Maler declaró justo antes de su muerte que la escena grabada no era más que una parte de un friso continuo que rodeaba el interior de una cámara subterránea.
Sí, convenientemente, la imagen no proviene de una de las innumerables obras publicadas por Maler, sino que es una imagen secreta divulgada solo en una confesión proverbial en el lecho de muerte. ¡Más cómodamente, la ubicación era desconocida! Nota para más adelante que Stacy-Judd solo afirma que Maler tomó una fotografía del friso bajo tierra y no la publicó. Esto se volverá importante.
Stacy-Judd luego debate si el friso representa la inundación de la Atlántida o la inundación que él cree que causó que los mayas migraran a México en los primeros siglos antes de concluir: "Cualquiera que sea la explicación, una cosa es segura: poseían conocimiento positivo no solo del Gran Diluvio, pero de muchos otros eventos registrados en la Biblia. "Sí, por supuesto están en la historia de la Biblia. ¿Su fuente? Él cita a Ignacio Donnelly.
Teoberto Maler era un explorador austro-alemán (y más tarde un ciudadano mexicano) que viajó a México con el demandante de los Habsburgo en el trono de México, el emperador Maximiliano. Después de la caída del Imperio, pasó la mayor parte de su vida documentando ruinas mayas. La fotografía que Stacy-Judd le atribuye no coincide con las fotografías publicadas de Maler, ni el dibujo se parece al estilo artístico habitual de Maler. Para comparar, a la derecha hay una fotografía genuina de Maler de un bajorrelieve en una estela.
Como puede ver, la composición, el uso de la luz, etc. son todos diferentes. Después de revisar cientos de fotos de Maler, es evidente que la imagen de Stacy-Judd carece de los detalles del trabajo en piedra que esperamos ver en una imagen real. Es demasiado liso, falto de detalles granulares. En cambio, es más similar a los dibujos y pinturas romantizados realizados por Catherwood. Contiene elementos que no se ven en el arte maya típico, incluida la pirámide que se desmorona y la disposición moderna y el uso de la perspectiva. Sus líneas son más duras, más cuadradas que el arte maya típico, pero muy acordes con el estilo de Renacimiento Maya inspirado en el Art Deco (también llamado Renacimiento Azteca) favorecido por Stacy-Judd.
Es un dibujo bien hecho, pero es casi seguro que lo haga Stacy-Judd, no Teoberto Maler. Stacy-Judd tenía la habilidad artística para llevarlo a cabo, así como el bien documentado interés en el uso de las convenciones y temas artísticos mayas en su propio trabajo profesional. Hasta que alguien produzca una fotografía original, o mejor aún, el friso mismo, no hay ninguna razón para dudar de que esto sea falso.
La afirmación de que fue destruida en la Segunda Guerra Mundial en Berlín no puedo rastrear más allá de Childress, aunque debe haber obtenido la idea de algún lado. ¿Notó que sus afirmaciones contradecían las del libro de 1939 de Stacy-Judd, que nunca decía nada sobre el friso que abandonaba las Américas? El reclamo se desarrolló en una dirección interesante, sin embargo. Frank Joseph, en Survivors of Atlantis (2004), entre sus otros libros que repiten las mismas afirmaciones, calificó al friso como "la evidencia más persuasiva" de que los mayas descendieron de los atlantes y afirma que se encontró en lo alto de la Central. Acrópolis en Tikal antes de que la sección fuera eliminada y enviada a Viena, donde se exhibió hasta que los soviéticos la saquearon en 1945. Joseph afirmó que el friso era el preciado tesoro del "Museo Voelkerkunde" de Viena (Museum für Völkerkunde, ahora el Weltmuseum) hasta los soviéticos lo saquearon, ¡todo sin producir un solo registro de su existencia! ¿Cómo puede haber causado una "sensación" en Viena como afirma Joseph sin ser mencionado en la prensa vienesa? (Los artefactos mexicanos reales del museo son en su mayoría colecciones enviadas a Viena por Dominik Bilimek y Philipp J. Becker, no por Teoberto Maler). Afirma en otro libro que las "copias" del friso de Maler se almacenan en la Universidad de Pensilvania. Sin citar fuentes, Joseph afirmó que el friso provocó que Maler abandonara el escepticismo en favor de una creencia total, algo que ni siquiera Stacy-Judd atribuyó al erudito fallecido hace mucho tiempo.
Todo esto parece ser una corrupción de la afirmación de Childress de 1992 de que Maler envió todo el friso desde la Acrópolis Norte a Berlín, donde se exhibió hasta que los estadounidenses bombardearon el museo en la Segunda Guerra Mundial, probablemente basándose en la comprensión obvia de Joseph de que Maler era austríaco, el friso de la Acrópolis Norte todavía está en Tikal, y que los Aliados nunca bombardearon el Hofburg en Viena, donde se encuentra la colección de antigüedades mexicanas de Austria.
Este revoltijo de afirmaciones es bastante confuso. ¿Por qué Maler, un ciudadano mexicano que trabaja para el Museo Peabody de Harvard, envía parte (o la totalidad) del friso a Viena? Si lo hubiera encontrado durante el reinado de Maximiliano, se habría ido a la ciudad de México; más tarde, Maler no tenía ninguna conexión con Viena en absoluto. ¿Por qué no hay fotografías in situ, o incluso fotografías de medio siglo que supuestamente se gastaron en exhibición en Viena? ¿Por qué no hay registro de museo? Los Habsburgo no eran tímidos; habrían pregonado un artefacto que sería tan sensacional como el relato babilónico del Diluvio que fue la gran sensación del Museo Británico. ¿Por qué el relato de José no concuerda en cada detalle con el de Stacy-Judd, quien había afirmado que Maler tomó la foto en secreto, que el friso estaba bajo tierra, y que confesó esto solo al final de su vida? ¿Por qué su cuenta parece ser una versión de Mad Libs de la cuenta de Childress?
El incidente que describen Joseph y Childress en diversas formas parece ser una distorsión de un incidente real de la ciudad de Yaxchilan, donde Percival Maudslay cortó un dintel para enviarlo al Museo Británico. Fue enviado accidentalmente al Museum für Völkerkunde en Berlín, donde permaneció hasta que fue destruido durante los bombardeos aliados en la Segunda Guerra Mundial. Sabemos que este dintel no era el supuesto friso de la Atlántida porque aún existe un yeso en Londres. Este incidente debe atribuirse a Maler porque se hizo cargo de Maudslay y también discutió el dintel en sus Investigaciones en la parte central del Valle de Usumatsintla (1903), en el que documentó la ciudad y su arte. Este incidente se ha combinado con la relación de Maler con Tikal, que exploró con Carl Gustav Bernoulli, quien envió dos dinteles de madera tallada a otro museo de Völkerkunde, este en Suiza. Finalmente, la participación de la Universidad de Pensilvania debe provenir del hecho de que la escuela realizó las excavaciones más extensas como Tikal, en la década de 1950, y por lo tanto tenía copias de los materiales publicados por Maler como registros de archivo.
Fuente: http://www.jasoncolavito.com/blog/did-the-maya-depict-the-end-of-atlantis-at-tikal
Expertos ufologos autentican esta informacion como veridica, juran y perjuran, que dicha leyenda occurrio, y como prueba fiel es esta foto (mejor dicho, dibujo)...
Y por supuesto, dicen los antiguos astronautas, tan cierto como lo es el astronauta de palenque y los elefantes rosados del desierto del Sahara....
Los invito a involucrarse en esta historia al mejor estilo de los expedientes X....
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| La virulenta imagen del friso de Maler. |
La imagen que se presenta como una genuina pieza de arte maya de la ciudad de Tikal. A primera vista, parece representar a un maya que escapa de un volcán. Tenga en cuenta, también, la pirámide colapsada a la izquierda
Otras fuentes rutinariamente describen esto como una "fotografía" y como una representación del hundimiento de la Atlántida. ¡Algunos especuladores en línea incluso intentan identificar el pez en la esquina inferior izquierda con el celacanto! Peor aún, ¡otros dijeron el mes pasado que era trabajo de Freemason o Illuminati!
Puede preguntarse por qué no ha visto esta pieza de arte por todas partes, ya que aparentemente es una representación tan dramática de una erupción volcánica. Bueno, hay una explicación conveniente para eso. Supuestamente, la pieza fue cortada desde lo alto de un templo maya en Tikal y enviada a Berlín, donde fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial. Esa es la historia que David Hatcher Childress cuenta en Lost Cities of Atlantis (1996) y Lost Cities of North and Central America (1992). Naturalmente, la única documentación de esto es esta única "fotografía", que estoy seguro de que reconocerá que es casi seguro un dibujo.
Entonces, ¿de dónde vino la imagen?
Fue publicado en 1939 en Atlantis: Mother of Empires por Robert Stacy-Judd, un arquitecto inglés conocido por -esperarlo- trabajando en el estilo arquitectónico del Renacimiento Maya. Un artista consumado, decoró sus edificios con arte imaginativo al estilo de los antiguos mayas. Su libro era una alegre mezcla de hechos y ficción, y la ilustración de arriba casi con certeza fue creada por él como una representación ficticia de la Atlántida que él creía que estaba detrás de la civilización maya, basándose en las afirmaciones similares de Ignatius Donnelly y Augustus Le Plongeon.
El dibujo aparece como una placa opuesta a la página 91 en el libro (que fue, por supuesto, reimpreso por David Hatcher Childress for Adventures Unlimited en 2007) con un título que lo describe como una fotografía de un bajorrelieve que representa el hundimiento de la Atlántida. La discusión de Stacy-Judd en el cuerpo del texto brinda más detalles. Comienza diciendo que la "fotografía" está en su propia colección privada.
La foto fue tomada por Teobert Maler en un lugar remoto y desconocido en el fondo de las junglas de Yucatán. Maler declaró justo antes de su muerte que la escena grabada no era más que una parte de un friso continuo que rodeaba el interior de una cámara subterránea.
Sí, convenientemente, la imagen no proviene de una de las innumerables obras publicadas por Maler, sino que es una imagen secreta divulgada solo en una confesión proverbial en el lecho de muerte. ¡Más cómodamente, la ubicación era desconocida! Nota para más adelante que Stacy-Judd solo afirma que Maler tomó una fotografía del friso bajo tierra y no la publicó. Esto se volverá importante.
Stacy-Judd luego debate si el friso representa la inundación de la Atlántida o la inundación que él cree que causó que los mayas migraran a México en los primeros siglos antes de concluir: "Cualquiera que sea la explicación, una cosa es segura: poseían conocimiento positivo no solo del Gran Diluvio, pero de muchos otros eventos registrados en la Biblia. "Sí, por supuesto están en la historia de la Biblia. ¿Su fuente? Él cita a Ignacio Donnelly.
Teoberto Maler era un explorador austro-alemán (y más tarde un ciudadano mexicano) que viajó a México con el demandante de los Habsburgo en el trono de México, el emperador Maximiliano. Después de la caída del Imperio, pasó la mayor parte de su vida documentando ruinas mayas. La fotografía que Stacy-Judd le atribuye no coincide con las fotografías publicadas de Maler, ni el dibujo se parece al estilo artístico habitual de Maler. Para comparar, a la derecha hay una fotografía genuina de Maler de un bajorrelieve en una estela.
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| Detalle y Estilo de Maler en sus representaciones. |
Es un dibujo bien hecho, pero es casi seguro que lo haga Stacy-Judd, no Teoberto Maler. Stacy-Judd tenía la habilidad artística para llevarlo a cabo, así como el bien documentado interés en el uso de las convenciones y temas artísticos mayas en su propio trabajo profesional. Hasta que alguien produzca una fotografía original, o mejor aún, el friso mismo, no hay ninguna razón para dudar de que esto sea falso.
La afirmación de que fue destruida en la Segunda Guerra Mundial en Berlín no puedo rastrear más allá de Childress, aunque debe haber obtenido la idea de algún lado. ¿Notó que sus afirmaciones contradecían las del libro de 1939 de Stacy-Judd, que nunca decía nada sobre el friso que abandonaba las Américas? El reclamo se desarrolló en una dirección interesante, sin embargo. Frank Joseph, en Survivors of Atlantis (2004), entre sus otros libros que repiten las mismas afirmaciones, calificó al friso como "la evidencia más persuasiva" de que los mayas descendieron de los atlantes y afirma que se encontró en lo alto de la Central. Acrópolis en Tikal antes de que la sección fuera eliminada y enviada a Viena, donde se exhibió hasta que los soviéticos la saquearon en 1945. Joseph afirmó que el friso era el preciado tesoro del "Museo Voelkerkunde" de Viena (Museum für Völkerkunde, ahora el Weltmuseum) hasta los soviéticos lo saquearon, ¡todo sin producir un solo registro de su existencia! ¿Cómo puede haber causado una "sensación" en Viena como afirma Joseph sin ser mencionado en la prensa vienesa? (Los artefactos mexicanos reales del museo son en su mayoría colecciones enviadas a Viena por Dominik Bilimek y Philipp J. Becker, no por Teoberto Maler). Afirma en otro libro que las "copias" del friso de Maler se almacenan en la Universidad de Pensilvania. Sin citar fuentes, Joseph afirmó que el friso provocó que Maler abandonara el escepticismo en favor de una creencia total, algo que ni siquiera Stacy-Judd atribuyó al erudito fallecido hace mucho tiempo.
Todo esto parece ser una corrupción de la afirmación de Childress de 1992 de que Maler envió todo el friso desde la Acrópolis Norte a Berlín, donde se exhibió hasta que los estadounidenses bombardearon el museo en la Segunda Guerra Mundial, probablemente basándose en la comprensión obvia de Joseph de que Maler era austríaco, el friso de la Acrópolis Norte todavía está en Tikal, y que los Aliados nunca bombardearon el Hofburg en Viena, donde se encuentra la colección de antigüedades mexicanas de Austria.
Este revoltijo de afirmaciones es bastante confuso. ¿Por qué Maler, un ciudadano mexicano que trabaja para el Museo Peabody de Harvard, envía parte (o la totalidad) del friso a Viena? Si lo hubiera encontrado durante el reinado de Maximiliano, se habría ido a la ciudad de México; más tarde, Maler no tenía ninguna conexión con Viena en absoluto. ¿Por qué no hay fotografías in situ, o incluso fotografías de medio siglo que supuestamente se gastaron en exhibición en Viena? ¿Por qué no hay registro de museo? Los Habsburgo no eran tímidos; habrían pregonado un artefacto que sería tan sensacional como el relato babilónico del Diluvio que fue la gran sensación del Museo Británico. ¿Por qué el relato de José no concuerda en cada detalle con el de Stacy-Judd, quien había afirmado que Maler tomó la foto en secreto, que el friso estaba bajo tierra, y que confesó esto solo al final de su vida? ¿Por qué su cuenta parece ser una versión de Mad Libs de la cuenta de Childress?
El incidente que describen Joseph y Childress en diversas formas parece ser una distorsión de un incidente real de la ciudad de Yaxchilan, donde Percival Maudslay cortó un dintel para enviarlo al Museo Británico. Fue enviado accidentalmente al Museum für Völkerkunde en Berlín, donde permaneció hasta que fue destruido durante los bombardeos aliados en la Segunda Guerra Mundial. Sabemos que este dintel no era el supuesto friso de la Atlántida porque aún existe un yeso en Londres. Este incidente debe atribuirse a Maler porque se hizo cargo de Maudslay y también discutió el dintel en sus Investigaciones en la parte central del Valle de Usumatsintla (1903), en el que documentó la ciudad y su arte. Este incidente se ha combinado con la relación de Maler con Tikal, que exploró con Carl Gustav Bernoulli, quien envió dos dinteles de madera tallada a otro museo de Völkerkunde, este en Suiza. Finalmente, la participación de la Universidad de Pensilvania debe provenir del hecho de que la escuela realizó las excavaciones más extensas como Tikal, en la década de 1950, y por lo tanto tenía copias de los materiales publicados por Maler como registros de archivo.
Fuente: http://www.jasoncolavito.com/blog/did-the-maya-depict-the-end-of-atlantis-at-tikal
Muchas gracias por explicar este tema, aunque yo pensé que el dichoso friso era real, pensé lógicamente de que si lo era, tendría que representar algo completamente distinto a lo que se le atribuía, que bueno que ahora ya sé lo que realmente sucede con este tema
ResponderEliminarGracias por tu comentario. Yo tambien creia en lo expuesto de este dato en foros llamados de arqueologia alternativa e incluso ufologicos. Bendiciones.
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